miércoles, 22 de enero de 2014

FRASES COBARDES.


               

Me refiero a esas frases que tanto oímos y utilizamos, pero que   -si la analizamos con cierta calma-  no son tan neutras como parecen: bien porque crean complejos tontos o inútiles, bien porque con ella intentamos parapetarnos del mundo, no salir de nuestra zona de confort; que no nos molesten.  
 
 
Fuente: miprimerblognazaret.blogspot.com
 
                En realidad, lo que pretendo es que sonriamos un poquito y, si nos atrevemos, nos reconozcamos en alguna de ellas,..... por  si podemos hacer propósito de enmienda.


                - "Mejorando lo presente".  Para quién no la haya oído antes, pondré un ejemplo:  "Ana es muy buena profesional,..... mejorando lo presente". Traducido:  considero que Ana es mejor que tú;  pero, como acabo de darme cuenta que he metido la pata  (porque, indirectamente, te estoy diciendo que tú no eres tan buen@),  intentaré arreglarlo diciendo que Ana sólo es mejor que tú,...  si a ti no se  te cuenta.  
                La buena intención inicial de la frase, en realidad esconde una gran maldad, porque ya se sabe que las comparaciones son odiosas. Así que te propongo cambiarla por una frase más inclusiva "Ana es muy buena profesional, tanto como tú"; o  "Ana es muy buena profesional, si trabajarais junt@s, sería un equipo imparable".

 
                - "Esto lo arreglaba yo en diez minutos".  Lo primero es que rara vez será cierto que tengamos la capacidad de solucionar algo con tanta rapidez.  Y lo segundo es que esta frase suelen pronunciarla personas a las que  "se les va la fuerza por la boca": es decir, que hablan mucho pero que actúan poco.

                Así que yo pregunto: ¿has hecho algo, además de protestar, para arreglar esta situación?;  ¿has dicho con qué no estás conforme o qué crees que se puede mejorar?.

 
                - "¿Y qué quieres que le haga?".  Esta frase presenta una  "agravante"  respecto a la anterior, porque quién la pronuncia adopta una posición de  "encogimiento total de hombros": ni siquiera protesta.

                Pues ya que me lo preguntas, te diré que quiero que hagas: quiero que, por lo menos, lo intentes; que te preocupes por si hay una solución posible; que no te limites a darme la razón para no hacer nada después.

 
                - "Yo sólo soy un mandao". Suele ser la continuación de la frase anterior. Y puede ser verdad que quien la pronuncia no tenga ningún poder de disposición o decisión.

                Pero: ¿es tan complicado, tan  "peligroso"  hablar con quién sí puede decidir a ver si hay algo que se pueda hacer?. ¿Te conformas con  no tener voz ni voto?.


                - "Es que yo soy así/A mi edad no tengo remedio".  No conozco forma más  "fina"  de autodefinirnos  como egoístas. Con esta frase pretendemos que nos lo excusen todo, porque no tenemos remedio, porque no vamos a cambiar; que cambie el otro o la otra.

                Te contaré unos secretillos: no eres perfect@, por lo que más vale que cambies tú antes de que te obliguen a cambiar a la fuerza; no todo es excusable, y puede que algún día des con quién no quiera excusarte.  Y acuérdate: la empatía mueve el mundo.       

 
                - "El dinero no da la felicidad/Hay cosas que el dinero no puede comprar". Puedo estar parcialmente de acuerdo con estas frases, porque hay quién no sabe aprovechar lo que tiene, quién no sabe ser feliz con nada, aunque nade en el dólar; e, igualmente hay cosas que el dinero no puede conseguir.
                En todo caso, si el dinero ni da ni compra  la felicidad, lo cierto es que sí quita muchos sofocones y preocupaciones.

 
                - "El trabajo dignifica/Te ganarás el pan con el sudor de tu frente". Perdón, pero no. Lo que dignifica es la forma en que realizas cada cosa (trabajo, deporte, cocina,.......),  la actitud con la que afrontas tus tareas, sean cuales sean.
                A mí, en particular, no me importaría pillar una buena primitiva o lotería que me haga INDIGNA para el resto de mis días y que evite sudores.

 
               - "Si funciona, no lo toques". Cuando oigo esta frase, normalmente me pongo en guardia, porque sé que (en el 99% de los casos) irá seguida de otras tipo:  "es que no lo veo";  "experimentos en casa y con gaseosa";  "eso es mucho lío",.......
                En mi opinión, cuando algo funciona debes tomarlo no como un punto final, sino como un punto de partida: para ver qué y cómo mejorar o facilitar los procesos; para consolidar lo que funciona y cambiar lo que no lo hace; .....
 

                Permitidme acabar con una frase referida en exclusiva a las mujeres, pero que considero que puede llegar a ser muy dañina.

                - "Tranquila que cuando tengas  a tu hij@ en brazos por primera vez, se te olvidará el parto".  ¡¡ JA ¡¡¡. Se te olvidará si el parto ha sido bueno, que si no.....  Y la segunda parte de esta gran mentira es que  -como a ti no se te han olvidado ni uno sólo de los dolores-  te entra complejo de mala madre, de desnaturalizada,...  Doble castigo: los dolores físicos y el complejo psíquico.

                Así que,  chicas, seamos más realistas y prácticas: querámonos,  para ser un poco más felices, más sanas y más  libres.
 
 

¿Te sabes alguna otra  frase cobarde que quieras compartir?