Hay cosas tan obvias, tan
repetidas, que se convierten en tópicos. Pero también corremos el riego de que
se nos olviden. Hablo de las faltas de ortografía y de gramática
(entendida ésta como "Arte de hablar y escribir
correctamente una lengua").
Es
cierto que las nuevas vías de comunicación (whtasapp, sms,mms,...) han tenido una influencia
decisiva sobre la forma en la que redactamos y expresamos nuestras ideas: usamos extranjerismos, abreviaturas, símbolos,
emoticonos,
"castellanizamos"
términos, otros los hacemos más coloquiales, ....
Intentamos
que nuestra vida sea más fácil; pero también
podemos incurrir en errores garrafales que dejen en evidencia
nuestras carencias, arruinando -o cuando
menos afeando- nuestra "imagen". Me explico.
El
Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua establece varias acepciones de la palabra CULTURA.
A efectos de este artículo me quedo con la
siguiente: "Conjunto de modos de vida y
costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico,
industrial, en una época, grupo social, etc...." Igualmente dice que EDUCACIÓN
significa, entre otras cosas,
"cortesía, urbanidad".
Cuando
me enfrento a una selección, en el
primer vistazo no suelo detectar estas faltas ortográficas y/o gramaticales. Pero
cuando entro a fondo en las candidaturas que considero interesantes, ¡¡¡no podéis imaginar lo que se encuentra¡¡¡. Algún día, los seleccionadores podríamos
publicar un libro, al estilo del de las respuestas de los alumnos en los
exámenes. Pero
OJO: estos mismos errores se producen (y cada vez más) en la redacción de las
ofertas de empleo.
Evidentemente,
hay que tener en cuenta el puesto para el que seleccionas (no puede pedirse lo mismo a un Auxiliar de taller
que a un Profesor universitario); pero también debemos recordar que existen herramientas -al alcance de todos- que pueden
evitar errores "básicos" (correctores
de textos, diccionarios on line,..).
No
se trata de redactar como Cervantes o como Gala: se trata de expresar las ideas
sin faltas ortográficas, de forma
coherente, ordenada e inteligible. Una
Oferta de trabajo o una Candidatura deben considerarse DOCUMENTOS FORMALES y,
como tal, deben ajustarse a las reglas mínimas de Cultura y Educación.
Otra
cosa muy curiosa: donde menos errores o faltas se producen es en el curriculum.
Quizás porque se suelen usar formatos
más estándares o rígidos. ¡¡¡Pero las
cartas de presentación y las pruebas escritas son una mina¡¡¡. Y si
hablamos de las redes sociales,.....
Es
cierto que el impacto y la importancia de una mala redacción o de las faltas de
ortografía, dependen del contexto y del
receptor. Sin embargo, no lo es menos que, por
regla general, dicen mucho de su autor: desinterés, prisa, salir del paso,
falta de cultura (ausencia de conocimientos y desarrollo) y/o educación
(defectos de cortesía y urbanidad), .......
¿Es necesario arriesgarse?